miércoles, 28 de febrero de 2007

Luis Mateo Díez: 'Recuerdo de Manuel Andújar'


Recuerdo de Manuel Andújar

Por Luis Mateo Díez


Manuel Andújar coincidió con Sabino Ordás en el exilio mexicano tras algunos avatares comunes derivados de nuestra guerra civil, Sabino ofrece datos de la amistad que le unió y, sobre todo, de su valoración de la personalidad humana y creadora de Andújar, en el artículo que a continuación presentamos. Ambos volvieron a coincidir en Madrid muchos años después, y yo fui testigo de ese reencuentro, en compañía de Juan Pedro Aparicio y José Mª Merino. Cuando con estos amigos preparamos la recopilación de artículos de Sabino que daría pie a su libro ‘Las cenizas del Fénix’, se nos ocurrió que la persona más adecuada para hacer su presentación era Andújar. El libro ganó así un entrañable y valiosísimo testimonio sobre la amistad y el exilio, dos asuntos en los que Andújar era experto. Sabino sigue viviendo, con más años de los que puede, como él dice, en Ardón, un pueblecito leonés de las orillas del Esla. Andújar ya no está con nosotros, aunque quienes le quisimos y admiramos mantenemos viva su memoria. Recuerdo una llamada de Sabino días después del fallecimiento de Andújar: 'Murió Manolo, me dijo, y en este caso hay que decir con más razón que nunca se muere un buen pedazo de los que fuimos'.

Como recuerdo del maestro de Lares y penares me parece oportuno el artículo de Sabino sobre la memoria del exilio. Cuando apareció en PUEBLO, hace tantos años, yo quedé en comer con Andújar para llevárselo, por orden expresa de Sabino. Aquella tarde hablamos mucho del exiliado de Ardón y yo, haciéndome eco de sus palabras, comencé una particular operación para que Andújar recogiera en un volumen sus ‘Cuentos completos’. Años después yo mismo, atendiendo a su generoso encargo, me ocuparía de prologarlos para la edición de Alianza y, cuando Sabino tuvo entre sus manos el libro, sonrió más satisfecho que nunca. También recuerdo que cuando solió la edición de Vísperas, con motivo de la serie televisiva, Andújar tuvo mucho interés en que Sabino viniera desde Ardón a presentarla, en la que fue muy grata celebración con los actores, editores y responsables de la serie. También asumí yo la representación de Sabino, que habló de Vísperas en una hermosa y sentida carta a su compañero de fatigas. Recordar a Andújar es, como diría Sabino, recordar el rostro más preciado de ese preciado don que se llama amistad. Yo diría cumpliendo el papel de mensajero entre las dos orillas de una amistad ejemplar.


Luis Mateo Díez



En la página XI del suplemento de ‘Caminar Conociendo’, FONTANA SONORA, del nº 4 de mayo de 1995

SABINO ORDÁS (*) (1): 'Manuel Andújar, la Memoria del Exilio'

Manuel Andújar

Manuel Andujar, la memoria del exilio


Por Sabino Ordás (*) (1)

Recibo carta del joven historiador Paul Preston, con quien tantas horas tengo compartidas por las aulas de Oxford y de Reading. Todas sus misivas inciden de una u otra forma en el tema del exilio, y esconden como una cordial admonición hacia los supervivientes –que nuestra amistad de algún modo le lleva a simbolizar en mí- en el sentido de recabarnos el testimonio total de nuestra información y de nuestro recuerdo, sobre esa etapa sustantiva de nuestras vidas.

Hay un legado vivo, emocional, que hermana el dato elocuente de primera mano y el detalle matizador, y ese legado -me viene a decir Preston- sólo lo detentáis vosotros, y debe verterse al margen de la obra de la creación y de tantas colaboraciones y contribuciones de signo erudito y estudioso, tan imprescindibles también, por el cauce confesional de la memoria.

Su carta coincide en mi mesa de trabajo, aquí en la casona familiar de Ardón, que un día de estos debo decidirme a retejar, porque inminentes amenazas de goteras, con otra de Manuel Andújar, entrañable compañero de tantos avatares por aquellos años de nuestra forzada diáspora.

Y meditando sobre esa invitación animosa de Paul Preston, la personalidad entrañable de Andujar se me vuelve a iluminar –otras incontables iluminaciones las he tenido al devorar sus bellos libros y al departir con él infinitas charlas- desde esa concreta perspectiva en que Preston nos requiere.

Si yo tuviese que citar un nombre capaz de resumir, sobre la experiencia y la confluencia, facetas sustanciales de nuestro exilio, ese nombre sería sin duda el de Manuel Andujar, auténtica memoria de humilde, paciente, generoso y entregado recolector, protagonista y espectador privilegiado de tanta historia general y cotidiana.

Entre todas nuestras particulares memorias podría, por supuesto, contribuir a esa honda y vital memoria plagada de perfiles que, desgraciadamente, se consume con sus protagonistas. Pero yo me daría por satisfecho con que, al menos, una gran memoria individual dejase su testimonio como legado que a todos nos abarca, desde el punto de mira de un horizonte tan amplio como el que Andujar tiene asimilado.

Son largas las referencias de quienes y prolongado han vertido recuerdos sobre esa aventura del exilio, y es, por cierto, bien nutrida de bibliografía que enfoca el fenómeno desde varias perspectivas. Como también es cierto que fenómeno tan amplio y prolongado acaso necesitara de una auténtica institución coordinadora –a modo de instituto de estudios- para promover y compaginar la exhaustiva y global investigación. Tengamos en cuenta, solo como dato meramente indicativo, que el exilio –desde el dramático salto del año 39- se fueron cerca de 80 narradores, cifra mas que suficiente para dejar desarbolado cualquier frondoso panorama literario.


Andujar, con quien coincidí en el campo de concentración de Saint Cyprien, de cuyas concretas vivencias nacieron sus crónicas luego publicadas en México, pertenece a ese estilo de personalidades cimentadas sobre la acción de la generosidad, como si el vuelco a los demás fuese el resorte imprescindible para conocer el mundo y estar en él. Y esa disposición que ostenta la contrapartida de un rigor visceral hacia lo que uno hace, hacia la propia obra, se traduce –como no puede ser de otra manera- en una dimensión humana abierta y acogedora, de esas a las que se recurre con el convencimiento del consuelo y la comprensión, del ánimo y confidencia.


Yo recuerda algunas horas compartidas en la redacción de ‘Las Españas’, la revista que fundara José Ramón Arana, horas de tertulia y trabajo, en la capital azteca, donde llegaban, entre otros, Anselmo Carretero, Pepe Puche Planas, Mariano Granados y Eduardo Robles. Y las recuerdo con la insistencia de un hormigueo emprendedor, con Manuel Andujar, contabilizando presencias tempranas y lejanas, ausencias irremediables, repasando el fichero mental de sus multiplicados conocimientos sobre el exilio, acariciando el cauce de conjunción que la revista suponía.

Pienso que Andujar, que ha cultivado su obra de creación con un rigor sin paliativos, eligió un camino mucho más generoso hacia los demás que para si mismo. Su obra ha ido saliendo al exterior –y encontramos las valoraciones que se merece, aunque acaso no todavía con la profundidad necesaria- como con el esfuerzo que por si misma ha tenido que invertir para desbordar una excesiva humildad y una excesiva autocrítica.

No pretendo repasar ahora ese claro y original legado que es la narrativa de Andujar –tan sutilmente matizada por su poesía-, pero a nadie se le escapa a estas alturas que el ciclo fundamentas de sus ‘Lares y penares’ se sitúa entre los más grandes y ambiciosos empeños de nuestra novela contemporánea, junto a los equidistantes de Max Aub, Arturo Barea y Sender. Y a todos nos sigue debiendo Andujar –tal vez a los amigos un poco más- esa novela con la que culmina el ciclo ‘Fecha Mágica’, terminada y guardada como a la espera de una misteriosa decantación, actitud muy propia de la exigencia con que él entiende el quehacer literario. Y no sé si él –o algún editor menos ciego que otros-, la edición de los cuentos completos, faceta de su narrativa que personalmente admiro sobremanera.


‘Depositario lúcido de la dispersa memoria palpitante, comunicativa’, es una frase de Andujar con la que se refiere al buen amigo Arana en la breve introducción que dedicó a su novela ‘Can Girona’ al ser editada aquí en el 72. Yo quiero repetirla transfiriéndosela a él mismo bajo la estela de este recuerdo común que me sobre viene mientras escribo estas líneas, alentado por ese don de una memoria palpitante, singular e irremplazable, que es la suya. Porque al ser la más poderosa de todas, decididamente es la de todos.



Sabino Ordás



(*)Este artículo apareció originariamente en el diario PUEBLO el 10 de noviembre de 1978 y posteriormente fue recogido en el libro de Sabino Ordás LAS CENIZAS DE FENIX (nota de Luis Mateo Díez)


(1)Creemos que este Sabino Ordás es un apócrifo, invento del escritor Luis Mateo Díez y de sus amigos Juan Pedro Aparicio y José Mª Merino


-De las páginas XI y XII del suplemento FONTANA SONORA de la revista ‘Caminar Conociendo’ número 4 de mayo de 1995-

MANUEL ANDÚJAR: BIOBIBLIOGRAFÍA


Manuel Andujar:

Nació en La Carolina (Jaén) el 4 de enero de 1913. Sale desterrado de España en febrero de 1939 y permaneció en el campo de concentración de Saint Cyprien hasta mayo. Posteriormente sale para México donde estuvo muchos años. Regresó a España en 1967 viviendo en San Lorenzo de El Escorial en la calle Juan de Leyva 12-1 hasta su muerte.

OBRAS

Narrativa:
Partiendo de la angustia, Moncayo, México, 1944 y Endimión, 1987
Cristal herido, Isla, México, 1945 y Anthropos, 1985
La sombra del madero, Alfaguara, 1966
Vísperas: La llanura. El vencido, Alianza Editorial, 1975. Reedición en 1987
El destino de Lázaro, Andorra, 1970
Historia de una historia, Al-Borak, 1973. Texto íntegro: Anthropos, 1986
Cita de fantasmas, Laia, 1984
La voz y la sangre, Ibérico-Europea, 1984
Los lugares vacíos, Helios, 1971
La franja luminosa, Inventario provisional, 1973
Secretos augurios, Emiliano Escolar, 1981
Y los ‘Cuentos completos’ que cita Luis Mateo Díez mas arriba en nuestra revista que le ha publicado Alianza Editorial

Poesía:
La propia imagen, Fournier, México, 1962 y Ámbito Literario, 1977
Campana y cadena, Aldonza, 1965
Fechas de un retorno, Ámbito Literario, 1979
Sentires y querencias, Instituto de Cultura de Jaen, 1984

Ensayo:
Saint Cyprien, campo de concentración, Cuadernos de destierro, México, 1942
Literatura catalana en el destierro, Ateneo Español, México, 1949
Las revistas culturales y literarias en Hispanoamérica (tomo II ‘El exilio español de 1939’), Taurus, 1976
Cartas son cartas, Finisterre, México, 1968
Grandes escritores aragoneses en la narrativa española del siglo XX, Heraldo de Aragón, 1981
Andalucía e Hispanoamérica, crisol de mestizajes, Edisur, 1982
Signos de admiración, Instituto Cultural de Jaen, 1986

Teatro:
El Primer Juicio Final. Los aniversarios. El suelo robado, De Andrea, México, 1962
En la espalda, una X, Papeles de Son Armadans, 1972
Aquel visitante, Papeles de Son Armadans, 1975


EN PAG. XII DE 'FONTANA SONORA' SUPLEMENTO DE LA REVISTA 'CAMINAR CONOCIENDO' N0 4 DE MAYO DE 1995

Manuel Sánchez Mariana: 'Los manuscritos hebreos de la U. Complutense'


Los manuscritos hebreos de la Universidad Complutense

por Manuel Sánchez Mariana

La Universidad de Alcalá fue fundada por Cisneros a fines del siglo XV (del año de 1499 data la bula papal de su creación), iniciando las enseñanzas de Teología, Lógica, Filosofía y lenguas bíblicas, y una serie de cologios, llamados 'Menores', destinados especialmente a estudiantes pobres, cuyo cuyo número vario de los cinco iniciales a los 34 del siglo XVII, tanto de tipo seglar como de determinadas órdenes religiosas.

Desde el principio trató de vincular Cisneros al Colegio Mayor con la empresa científica por el patrocinada que le había de dar fama imperecedera: la edición de la Biblia Políglota. Para ello se hizo con los más importanrtes manuscritos bíblicos que pudo conseguir, que desde entonces quedaron vinculados a la Universidad, habiendo llegado en parte hasta nuestros días, aunque algunos de ellos se destruyeron o sufrieron graves deterioros en la guerra de 1936-39.

Así pues, la Universidad Complutense de Madrid, heredera de la de Alcalá, poseía dos importantes biblias latinas en escritura visigótica, de las que una se destruyó en la guerra y otra sufrió graves daños, habiendo sido restaurada recientemente. También poseía una famosa Biblia griega, enviada por el cardenal Besarión a Cisneros desde Venecia, también gravemente dañada y todavía hoy en periodo de restauración.
Mejor suerte, en general, corrió la importante colección de manuscritos hebreos.

La colección de manuscritos hebreos de la Complutense, corta pero una de las más valiosas conservadas en España, refleja, por tanto, los trabajos para la elaboración del texto bíblico de la Políglota, y sobre todo la labor del mejor hebraista de su generación, el judío converso Alonso de Zamora, profesor de hebreo en el Colegio Mayor complutense.

Destaca entre los códices hebreos la preciosa Biblia toledana del siglo XIII, con decoración marginal masorética en escritura cuadrada. Según una nota al final, el códice fue adquirido por R. Ishaq y R. Abraham de Toledo en 1280, mientras que otro anotador antiguo castellano estimaba 'que no había precio a su digna estimación', y que sus anotaciones eran dignas de que 'los judíos las pusieran entre diamantes'. Otra magnífica Biblia iluminda, del siglo XV, perteneció al citado Alonso de Zamora, quien escribió con letras hebreas una patética nota al final, alusiva a su situación personal. Otra magnífica Biblia, de gran antigüedad aunque no tan rica como la primera, sufrió graves deterioros y se encuantra en restauración.

Los restantes códices, hasta el número 21, contienen en general comentarios bíblicos, al Pentateuco, al Génesis y Éxodo (por Abraham ibn Ezra), a Isaias (por David Quimhi), así como versiones bíblicas del hebreo al latín por Alonso de Zamora y Pedro Ciruelo; completándose el conjunto con algún texto litúrgico (el Haz de vida de Hayyim bar Semuel Meir de Toledo, o los Himnos Pizmonim), y con varios textos gramaticales como el Diccionario de hebreo rabínico de Aarón el Sacerdote, y la Gramática y el Diccionario de David Quimhi. Conjunto representativo como ninguno conservado de lo que suponía la enseñanza en la universidad del siglo XVI.


Manuel Sánchez Mariana es Director del Fondo Histórico de la Universidad Complutense


(del suplemento 'Fontana Sonora', pag. XIII, de la revista 'Caminar Conociendo', nº 4 de mayo de 1995)




martes, 27 de febrero de 2007

P. Avilleira reseña dos libros de Yehuda Ha-Leví


P. Avilleira reseña dos libros de Yehuda Ha-Leví

1)Título: Poemas
Autor: Yehuda Ha-Leví
Editorial: Alfaguara
Ciudad: Madrid
Año: 1994

2)Título: El Cuzarí (edición facsímil, restringida a 110 ejemplares, de la tradicción castellana ‘s. XV’ del manuscrito 17.812 de la Biblioteca Nacional)
Autor: Yehudá Haleví
Edición literaria y prólogo de D. Antonio José Escudero Ríos; introducción de Dr. Carlos del Valle y epílogo del Dr. D. Manuel Sánchez Mariana


En relación con este libro (‘Poemas’ de Yehuda Ha-Leví) y sobre la próxima edición de ‘El Cuzarí’ del mismo autor que, en edición facsímil va a sacar neustro amigo y colaborador, Antonio Escudero, hemos recibido el siguiente comentario del escritor P. Avilleira que les ofrecemos encantados:

“Nuestro amigo Antonio José Escudero Ríos, que algunas veces sale de su estoica concha –que a él le gusta imaginar corteza forjada por el escepticismo y la misantropía, es decir creada por el desengaño del mundo- para mostrarnos en las páginas de esta entrañable revista de Las Navas algún destello de su alma, en realidad tierna y enamorada, lleva ya algún tiempo entregado pacientemente a la ingrata, pero imprescindible, tarea de hacer llegar hasta nosotros, en primorosas ediciones facsimilaras, algunas de las obras fundamentales de ese pensamiento judeo-español en el que él –erudito que ha sabido conservar la inocencia de aquellos que descubren las cosas por primera vez- tanto se complace.
Como hiciera hace algunos años con esa ‘Guía de los Perplejos’ del inmortal Maimónides, ahora nuestro estudioso extremeño prepara para nosotros la edición de la primera traducción –anónima y del siglo XV- al castellano del libro cumbre de Yehuda Ha-Leví, ‘El Cuzarí’.
Para aquellos que todavía no hayan establecido contacto con este poeta fundamental de nuestras letras (escondidos bajo la grafía hebrea trazada por su cálamo se halla la ruda sonoridad de los primeros versos de nuestra lengua que conservamos) ha sido publicado recientemente un libro (Yehuda Ha-Leví ‘Poemas’, con introducción y notas del profesor Ángel Sáez-Badillo y la doctora Judit Tarragona Borrás y unos hermosos e interesantísimos estudios literarios de la doctora Aviva Dorón) que es una auténtica joya que nos permite, adentrarnos en el hermoso pensamiento de este gran poeta judeo-español del siglo XI.
‘El Cuizarí’, el libro que nuestro querido Antonio se dispone a editar, es un diálogo entre el rey de los jázaros y un sabio israelita que le explica los fundamentos de la religión mosaíca y le demuestra la excelencia de ésta sobre las demás. El suceso que sirve de base al ‘Cuzarí’ no es una ficción del poeta, como algunos llegaron a suponer, sino un hecho histórico. En la segunda mitad del siglo XII, un rey de los Khazares o jázaros, se convirtió con buena parte de su gente al judaísmo. Fundándose en este hecho supone Ha-Leví que este rey tuvo un sueño en el cual un ángel le decía: ‘Tu intención es grata al Señor, pero tus obras no le son agradables’. Propúsose entonces el rey inquirir todas las opiniones y creencias religiosas, para lo que consultó a un filósofo, a un cristiano y a un musulmán. Ninguna de las tres doctrinas le satisfizo y decidión entonces consultar a un doctor judío, el cual explicó tan cumplidamente los fundamentos de su fe, que el rey abrazó el judaísmo, y después del rey sus generales y magnates, y por último, todo el pueblo, ‘y mandaron venir sabiso y libros de todas las tierras y aprendieron la Ley’.
Como dice Carlos del valle en ese prólogo que tomará edición de Escudero: ‘El camino del justo para conseguir la unión con Dios es la obediencia gozosa a la voluntad divina tal como se manifiesta en la revelación, animada por la plegaria y el culto divino. La ascesis total, el cenobismo, está excluido por esta vía. El justo controla por la razón las fuerzas de su alma. En los momentos de flaqueza o caída se recupera con los altos del camino –la vía litúrgica, el sábado, las fiestas sagradas, especialmente el día del ayuno, del Perdón… Creo expresa nítidamente Vadja, elevándose de esta manera a una comunión supraintelectual y angélica, el justo adquiere en la tierra la certeza de la felicidad del mundo futuro y tiene ya una pregustación de sus delicias’.
Anda, Antonio, olvida tus misantropías y acude este sábado a la fiesta sagrada de nuestro bar. Que por ti yo diré, como dice ‘El Levita’ en uno de esos versos del libro de poemas del que también hemos hablado:
Ante el grupo
De los amigos diré
Con el corazón apenado:
La brisa del jardín es perfumada
‘¡Levantad y bebamos!’"

Fdo: P. Avilleira

(creemos que bajo este nombre se esconde el escritor Joaquín Lledó que es ahora redactor jefe de la revista 'Album Letras Artes')


(de la página XIV del suplemento de la revista ‘Caminar Conociendo’ FONTANA SONORA del nº 4 de mayo de 1995)

martes, 20 de febrero de 2007

José Mª Amigo Zamorano: Reseña: Jesús Fonseca Escartín, 'Poemas vestidos de viaje'

Reseña: Jesús Fonseca Escartín, ‘Poemas vestidos de viaje’

Por José Mª Amigo Zamorano

Título: Poemas vestidos de viaje
Autor: Jesús Fonseca Escartín
Quirón Ediciones
Ciudad: Valladolid
Año: 1994

Publicado por Quirón ediciones de Valladolid, en septiembre, tiene 5 partes, más un soneto a modo de prólogo de Santiago Castelo y un epílogo de Juan Gustavo Cobo Borda; estas partes son: ‘Canciones del otro lado del olvido’, ‘Tiempo de otro tiempo’, ‘El peso de sentir’, ‘Al galope de los días’ y ‘Los pecados ladran’.
Ya en el frontispicio nos dice, en palabras del romance del Conde Arnaldos, ‘Yo no digo mi canción sino a quien conmigo está’, con lo que parece advertirnos, del vano intento de abarcar, o hurgar tan siquiera, el alma poética del que está en nuestras antípodas ideológicas o espirituales.
Para acercarnos, en lo posible, a su canción, hemos seguido su hilo poético desde el principio al fin.
Y en el principio estaba Dios, el amor iberoamericano y la alegría. Y como los designios de Dios son insondables, le han llevado por ‘los caminos del llano (americano) adentro’, los ojos bien abiertos, para que entre la vida en sus poemas; el espíritu y el cuerpo, abiertos también, para recibir de lleno todo ese cúmulo de sensaciones y estar preparado para esa nueva vida que se abre ante él y ‘gozar, gozar y gozar sin censura’: ‘brisa de besos’, ‘torsos desnudos’, ‘españoles del éxodo’ que habían ido para que no ‘les amordazara el miedo’; ha visto como ‘fueron carcomidos por la necesidad rugosa de Castilla’.
En Argentina, Buenos Aires le recuerda a Borges; y menciona rincones por donde anduvo (‘todo nos dice adiós y se aleja’); y él también se aleja ‘sin que se note, de impostores y farsantes’. En África, Lambarené le acerca al diferente, a su caricia, sabe que por allí ‘los corazones de los tristes se juntan con la carne de los tristes’.
Lejos de casa, a ratos, le muerde la nostalgia. En Villa Leyva todo le parece reminiscencias de Castilla, de la época colonial. Allí les han recibido con fogatas, hasta altas horas de la noche. Regresan acompañados por ‘el canto ardido de deseo del ruiseñor, medio confundido por el aroma penetrante del jacarandá’.
Recuerda, en Cartagena de Indias, que desembarcó ‘con frailes y bribones, tunantes y bellacos’; y encontraron, ‘lo mismo que hoy se nos ofrece’, mujeres hechas para el amor y la guerra y ‘calamaris bravos, turbacos salobres de bronceados muslos que aún utilizan, como sus antepasados estuches fálicos’.
En Madrid, sus bajos fondos, donde viven su intimidad donceles perseguidos de doctrinas nefandas.
Se le viene a la memoria un pintor, de irreverentes cuadros, amigo suyo; pintura que era una mezcla de ‘mística canción y amor pagano’; se nos ocurre que como todo el libro de Jesús Fonseca. Más adelante el poeta, en su libro y en su vida real, se cansa del trasiego y regresa, como todo patriota, a la tierra a Castilla y ‘al poeta más amado’, el de Ávila, Juan de la Cruz.
Habría que decir para situarnos, que Jesús Fonseca Escartín es periodista, Delegado de la Agencia EFE para Castilla y León.
En el epílogo Cobo Borda se refiere a la actitud vital de Jesús Fonseca: ‘el peso carnal no está disociado del vuelo, la oración y por ello no es de extrañar, entonces, que San Juan de la Cruz vuelva a enseñarle el susurro del silencio y la fortaleza almenada de la espera’
Argumento que corrobora, en ‘Canción de la vida profunda’, Porfirio Barba Jacob, gran poeta colombiano al que cita el autor (prácticamente desconocido en España) el cual nos dice que la vida ‘es clara, undívaga y abierta como el mar’, citando, si mal no recordamos, a Montaigne; y un día somos mórbidos, otro móviles, o lúgubres, etc. Sin dejar, por eso, de ser hombres. Así nuestro escritor, un día puede ser pagano, y más adelante recluirse en templo místico. En fin, un libro que hay que leer, sencillo y complejo al mismo tiempo. Como el mismo ser humano.

Fdo: José Mª Amigo Zamorano

ESTE COMENTARIO, HECHO SOBRE EL LIBRO DE JESÚS FONSECA ESCARTIN, PUEDE LEERSE EN EL SUPLEMENTO ‘FONTANA SONORA’ DE LA REVISTA ‘CAMINAR CONOCIENDO’ Nº 4, ENTRE LAS PÁGINAS XIV Y XV. REVISTA DE FECHA MAYO DE 1995

lunes, 19 de febrero de 2007

José Mª Amigo Zamorano: ENTREVISTA: 'AL HABLA CON JORGE VALDANO'

ENTREVISTAMOS A JORGE VALDANO

Jorge Valdano, entrenador de un conocido equipo de fútbol, el llamado Real Madrid, acaba de incursionar en la literatura publicando un libro que está en todos las librerías. Une así, a su buen hacer como técnico del deporte más popular hay en día, su inquietud por la república de las letras.



Amablemente contestó a nuestras preguntas de la siguiente manera:


Caminar Conociendo: Ya sabe usted que en los primeros años… Por cierto, ¿cuántos años tiene?


Jorge Valdano: Tengo 39 años


C. C.: Le decía que en los primeros años de nuestra vida las cosas, los hechos, se nos gravan con muchísima fuerza y difícilmente se olvidan. ¿Guarda en su recuerdo de la niñez algún libro que le haya impresionado sobremanera? ¿Dígame cuál?


J. V.: Pues si, El Principito, de Antoine de Saint Exupery.


C. C.: Siguiendo con los recuerdos: Sr. Valdano, ¿qué poesía, copla o canción se le ha quedado prendida en su corazón? ¿Podría decirnos algún trozo?


J. V.: Del poemario ‘Veinte poemas de amor y una canción desesperada’, aquello de ‘Puedo escribir los versos, más tristes esta noche, escribir, por ejemplo, la noche está estrellada y titilan, azules, los astros a lo lejos…’ Estos versos de Pablo Neruda los tengo muy adentro.


C. C.: Ya que he mencionado a la niñez, sería muy oportuno preguntarle dónde nació.


J. V.: En un pueblo de Argentina que se llama Las Parejas.


C. C.: Como puede ver, esta revista nace del seno de la biblioteca, ¿iba por la biblioteca de Las Parejas?


J. V.: En mi pueblo no había, entonces, biblioteca, ni en mí casa libros. Pero ante la pasión por la lectura estos son problemas menores.


C. C.: Hace varios años en España estuvo de moda la literatura hispanoamericana: García Márquez, Vargas Llosa, Cortázar, Borges, Octavio Paz… Todavía hoy muchos de ellos están en los primeros puestos del ranking de ventas. ¿Qué opina de ello? ¿Tiene especial interés por alguno?


J. V.: Algunos han sido devaluados por el tiempo y otros prestigiados, pero todos son admirados. Si tuviera que elegir uno sería Borges. Pero entre tantos grandes es muy difícil tener razón. Casi me siento culpable por haber elegido uno.


C. C.: Entre ciertas personas hay la opinión de que para ser futbolista no hace falta estudiar. Convénzales de lo contrario.


J. V.: Conviene saber que el fútbol comienza en la cabeza y luego pasa a los pies. En el Madrid da gusto ver a Zamorano tomarle la lección a Raúl. Cuando mayor es la preparación, mejor es el futbolista.


C. C.: ¿Recomendaría alguna lectura para los jóvenes que quieren ser futbolistas?


J. V.: Las mismas que recomendaría a aquellos que no quieren ser futbolistas. El error está en creer que el futbolista es un ciudadano distinto.


C. C.: ¿Nos podría decir un libro de la literatura americana y otro de la literatura española que haya leído últimamente?


J. V.: De la americana: ‘La balada de Johnny Sosa', de Mario Delgado Aparain; de la española: los cuentos de Ignacio Aldecoa.


C. C.: Conoce el señor Valdano nuestro pueblo de Las Navas del Marqués. Aquí nuestro Premio Nóbel Vicente Aleixandre se lanzó a la poesía allá por el año 17 y pasó algunos veranos Butragueño.


J. V.: Tengo referencias por el mismo Emilio, pero no lo conozco.


C. C.: Zamorano, el señor Iván, y Zamorano yo mismo, ¿seremos parientes? En relación con el parentesco y las sangres, ¿qué opina de los conquistadores, el 5º Centenario y todas esas cosas?


J. V.: Opino que cuando llegaron los españoles ya estábamos ‘descubiertos’, pero creo que el patrimonio cultural que dejó la conquista es inmensamente superior a sus excesos (que los hubo)


C. C.: Zamorano, un servidor; y Zamorano, el señor Iván. Siguiendo con la sangre tan de actualidad en estos tiempos, ¿se ofendería si le llamaran sudaca?, ¿nota esa xenofobia de la que nos hablan los medios de información?


J. V.: Sudaca es un término despectivo. Un neologismo que de alguna manera indica un triste repunte de la xenofobia. Los hombres populares nos sentimos más defendidos de la discriminación. Francisco Umbral dijo (para mi gusto con razón): ‘el racismo es la lucha de clases en colores’.


C. C.: ¿Cuánto tiempo se quedará con nosotros? Se lo pregunto por aquello de la nostalgia.


J. V.: Mi nostalgia tiene dos filos: si estoy en España tengo nostalgia de Argentina; y si estoy en Argentina de España. No hay remedio para el desarraigo.


C. C.: Referente a la nostalgia, ¿se siente nostálgico leyendo a Martín Fierro?


J. V.: Cuando leo el Martín Fierro siento nostalgia de mi escuela primaria porque fue donde lo leí por primera vez.


C. C.: Por último, dígame qué le ha parecido la revista ‘Caminar Conociendo’.


J. V.: Me pareció estupenda, como todas las revistas que pretenden ser un lugar de encuentro.

Textos: José Mª Amigo Zamorano

(Esta entrevista realizada por José Mª Amigo Zamorano a Jorge Valdano se halla en las páginas VIII y IX del suplemento ‘Fontana Sonora’ del nº 4 de la revista ‘Caminar Conociendo’ de mayo de 1995)

José Mª Amigo Zamorano: RESEÑA: TUA FORSSTRÖM, 'Antología poética'

Porvoo (Finlandia)

RESEÑA: TUA FÖRSSTROM, ‘Antología poética’

Por José Mª Amigo Zamorano

Título: Antología poética
(traducción y prólogo de Jesús Pardo)

Autora: Tua Forsström
Editorial: Endimión
Ciudad: Madrid
Año: 1994
(Donado por Embajada de Finlandia)

Tua Forsström nació en 1947 en la ciudad finlandesa de Porvoo ((Borga en sueco). Estudió Humanidades en la Universidad de Helsinki. Trabajó durabte años en una editorial, viviendo actualmente en Tammisaari (Enemas en sueco) en la costa sur de Finlandia. Ha publicado 8 libros de poesía y colaboró con compositores en la sintetización de dos formas de ruidos: la música y el pensamiento expresado en sonidos verbales.
En la introducción Jesús Pardo dice que ‘el principal tema de la poesía de Tua es la vida cotidiana’. Lo que puede extraerse de la poetisa finlandesa es la impresión de no tener pretensiones sobre si misma y sobre la VIDA. En el largo poema de innumerables registros que es su obra se hallan en variadas formas asuntos muy importantes como por ejemplo: la cocina, la niñez, o el amor. ‘Sus más firmes verdades, pues la experiencia le ha enseñado que la vida no aporta verdades duraderas y que lo único auténtico existente es el mundo de los fenómenos y las relaciones ininterrumpidas, por muy rotas que parezcan’.
Un mundo al que debemos habituarnos, porque con su constante desasosiego, es el único agarradero humano.
Las influencias de la poesía de la escritora finlandesa son diversas, siendo Rainer M. Rilke el que más hondo ha calado, según ella misma ha declarado. En menor medida el griego Cavafis, Göran Sonnevi y un poco más que los anteriores Werner Aspenström.








ESTA BREVE RESEÑA DE JOSÉ MARÍA AMIGO ZAMORANO SOBRE TUA FORSSTRÖM PUEDE LEERSE EN LA PÁGINA XV DE 'FONTANA SONORA' SUPLEMENTO DEL Nº 4 DE LA REVISTA 'Caminar Conociendo' DE MAYO DE 1995

viernes, 16 de febrero de 2007

ANTONIO CASARES: 'ALEIXANDRINO'


"espejo en que estas letras se reflejan"



Vicente Aleixandre







El amor es el dios de los poetas

y no la destrucción, la negra diosa

que marchita los sueños de la rosa

y apaga el corazón de los planetas.



Amar el mar, las playas recoletas

en las que el pensamiento azul reposa,

amar místicamente cada cosa,

los días errantes y la noches quietas.



Dejar que la palabra libre fluya,

como diáfano día de diamante,

y antes de que la muerte nos destruya,



gozar la eterna rosa del instante.

(Ser una sombra de nosotros mismos

en el espejo de los espejismos...)



Antonio Casares

Bilbao, 23 de Mayo de 1994



APARECE ESTE SONETO EN LA PAG. 23 DEL Nº 4 DE LA REVISTA 'Caminar Conociendo' ILUSTRADO POR ÚRSULA MARTÍN, ALUMNA, ENTONCES, DEL TALLER DE PINTURA 'BENJAMÍN PALENCIA' QUE DIRIGE EL PINTOR ARTURO MARTÍNEZ

José Mª Amigo Zamorano: RESEÑA DE LIBROS: 'Avilas'

Título: Ávilas

Autor: J.Mª Muñoz Quirós y Díaz-Castilla


por José Mª Amigo Zamorano

Díaz-Castilla, primero por la izquierda




Este libro, prácticamente inencontrable, salió a la luz a últimos del año pasado. Ávilas es el título; y losautores son el pintor Díaz-Castilla y el poeta abulense amigo y colaborador de 'Caminar Conociendo', José Mª Muñoz Quirós.


Se trata de unos comentarios poéticos, acerca de Ávila capital, suscitados por la contemplación de los cuadros de Díaz-Castilla. Nace el comentario al convivir el poeta con los lienzos durante algún tiempo. Y no nos extraña la variada, hermosa y lírica prosa, ya que los cuadros dan para eso y para mucho más. El pintor recoge la visón de Ávila siempre desde el mismo punto. La luz se procesa en su cerebro, saliendo caad vez de una manera distinta, sugiriendo mares, islas, naves... tormentas, serenidades... primavera, verano... todo con brochazos enormes y que, no obstante, indican las muchas horas dedicadas por el artista a su qeuhacer, a lo que, aparentemente, es sencillo y para algunos pude parecer tosco o grosero, pero que consideramos ya de maestro consumado. Bajo la apariencia de Ávila en la perpecttiva, vista desde un punto, los artistas con Ávilas nos van desgranando sus ávilas interiores.





(tomada esta reseña de José Mª Amigo Zamorano de la pag. XV del suplemento 'Fontana Sonora' de la revista 'Caminar Conociendo', nº 4)

jueves, 15 de febrero de 2007

VICTORIANO CRÉMER: 'A la sombra del recuerdo'


A la sombra del recuerdo


por Victoriano Crémer


El año de 1944 fue tan significativo, tan decisivo para el alertamiento de la poesía que mandaban hacer los dioses dentro y fuera de las Españas, que siempre que me veo obligado a establecer alguna forma de relación entre mi quehacer, humilde y errante, y los libros que resultaron testimonio fehaciente del alentar poético español, se me proyecta el año de 1944 con las imágenes de 'Sombra del paraíso', 'Hijos de la Ira' y, ya entre los repliegues de la poética que se hacía en las provincias, aquel mi libro primero 'Tanto sonoro'. Todo lo cual me permite situarme, con superior permiso, precisamente entre las gentes hispánicas que despertaban a un mundo menos convulso en aquel año. Vicente Aleixandre, con aquella su apacible sonrisa y su tutelar sombra benemérita nos admitió en su casa tan del misterio y de la pena.


Victoriano Crémer.


Tomado de la página 24 del número 4 de 'Caminar Conociendo'. Mayo de 1995

VICTORIANO CRÉMER: 'Recuerdo de la casa del misterio'



Recuerdo de la casa del misterio
De Victoriano Crémer





¿Qué ha podido suceder en la Casa de ladrillos rojos, como encendidos por dentro, que ha corrido los velos de la pena


y se ha quedado ciega?


Es ya como un galeón a la deriva, desalmado, porque las ventanas son los ojos del alma de la Casa y las gentes que la habitaron


andan como sonámbulas por entre la niebla.


La Casa de ladrillos rojos se ha quedado triste, profundamente


triste, ya sin luz, tan sin alma, tan muerta.


Las almas muertas esperan la salida de la luna para ocupar sus


estancias y yo me alejo de su sombría y estricta


arquitectura con el respeto que producen los tremendos mausoleos de la pena.





Vicente Aleixandre, habitante de las sombras.





Victoriano Crémer, escritor y periodista





DE LA PAG. 24, DEL Nº 4, DE LA REVISTA Caminar Conociendo'. MAYO DE 1995

Alejandro Duque Amusco(*): 'Vicente Aleixandre visita Las Navas del Marqués en 1965


Por Alejandro Duque Amusco(*)



En esta villa fue. Era el verano desolado y duro
del año diecisiete -una guerra arrasaba-
las fronteras. En este pueblo alto, fresco y ligero
como un regato amable, entre rocas y cielo,
la tierra me dio el beso -amargo y fuerte- del saber.
¿Quién lo hubiera predicho? Las Navas...
Un viento
estremece mi memoria. Rubén... Yace una voz
dormida bajo el tiempo, y aquel adolescente que yo fui
la oyó,
y la hizo suya, hasta la médula de la claridad.
Sí, recuerdo en mis rodillas el libro abierto,
la hora recogida, el mirlo
desgranaba su canto en los pinares, llovía
el oro lento de la tarde,
y allí, oh luciente poesía, la página suspensa,
con su brillo de aurora que no pasa,
alumbraba mi vida como una madre eterna.
Madre de quien nací
a otro mundo más mío.

Junio de 1990
(*) Alejandro Duque Amusco es crítico, poeta y editor
(Segunda visita a Las Navas para redactar el prólogo a Album de Aleixandre y Dámaso Alonso que lleva por título 'El Grupo de Las Navas')
PÁGINA 25 DEL Nº 4 DE LA REVISTA 'Caminar Conociendo'. MAYO DE 1995

Agustín García Calvo: Fragmento de 'La Ilíada'



ILÍADA

(Versión rítmica inédita -entonces- de
Agustín García Calvo)


CANTO VII

AL ALBA SIGUIENTE REUNE ZEUS A LOS DIOSES, Y LES HABLA CON FUERTES AMENAZAS AL QUE DESOBEDEZCA Y HAGA OSTENTACIÓN DE SU PODER SUPREMO; ATERRADOS TODOS, SU HIJA ATENA, TRAS DECLARAR OBEDIENCIA, SUGIERE QUE SEA DADO ISPIRAR A LOS AQUEOS, PARA QUE NO PEREZCAN TODOS; A LO QUE RESPONDE ZEUS AMABLEMENTE; Y LUEGO, MONTANDO EN CARRO, DEJA EL OLIMPO Y SE VA A SENTAR EN UNA CUMBRE DEL IDA, DESDE DONDE MIRAR A LA CIUDAD DE TROYA Y LAS NAVES GRIEGAS.



Aurora veliazafrana cundió por toda la tierra,
y Zeus el goza-del-rayo a los dioses llamaba a asamblea
allá en la cumbre más alta del Olimpo el de ásperas-quiebras;
y él mismo hablaba, y los dioses prestaban todos orejas:
"¡Oídme, los dioses todos, y oídme, todas las deas,
que diga lo que el corazón me manda en sus entretelas!
¡No haya deidad, ni que sea varón ni hembra que sea,
que intente desbaratar mi palabra, y bien atendedla
todos al par!, que así cuanto antes cierre esta cuenta.
Pero al que yo por detrás de los dioses cate y entienda
que ir a amparar a los Troes o que a los Dánaos quiera,
ése al Olimpo azotado vendrá y a mala vergüenza,
o lo he de agarrar y echarlo al Tártaro de-onda-tiniebla
lejos allá, donde es más profundo el abismo so tierra,
allí donde está de bronce el umbral y de hierro las puertas,
tanto de infiernos abajo cuando es del cielo a la tierra:
luego sabrá cuánto soy sobre todos los dioses en fuerza.
O, si no, ¡ea, que más lo sepáis, haced, dioses, la prueba!:
un cable de oro dejemos del cielo abajo que penda,
y todos a él colgáos los dioses y todas las deas:
mas ni aun así podréis arrastrar del cielo a la tierra a Zeus
el sumo caudillo, por mas que andéis de faena;
pero, como yo tirar y arrastrarlo podré y con las mares enteras;
y el cable después de un alcor del Olimpo acaso lo prenda
y amarre, y toda la masa se quede en vilo suspensa:
tanto por cima de dioses está y de hombres mi fuerza".
Tal dijo; y todos quedaron callando en muda sorpresa,
de su discurso pasmados; pues harto fuerte lo hiciera.

(página 26 del número 4 de la revista 'Caminar Conociendo'. Mayo de 1.995)

José Mª Amigo Zamorano: RESEÑA DE LIBROS: 'Flor de santidad'

Por José Mª Amigo Zamorano

Título: Flor de santidad
Autor: Ramón del Valle-Inclán
Editorial: Cátedra (Letras Hispánicas)
Ciudad: Madrid
Año: 1993

Si siempre nos alegra que se reediten obras del gran escritor gallego y español universal, Ramón del Valle-Inclán (aún están por editarse las obras completas), más alegría nos produce que esta labor venga de una amiga y colaboradora, la profesora Mª Paz Díez-Taboada. Flor de santidad, esta es la obra del insigne gallego que nuestra amiga ha reeeditado. Se reproduce el texto de la edición de 1920, última publicada en vida de su autor, con un estudio introductorio de 120 páginas, por parte de Mª Paz, minucioso y documentadísimo. Pero no solo eso, también en notas a pie de página se explican palabras de difícil comprensión, por infrecuentes o por ser galleguismos en los que tanto abundó Valle-Inclán, a fin de que el uso continuado del diccionario no entorpezca el hilo de la obra que reseñamos.
Flor de santidad fue la cuarta novela original de Ramón del Valle-Inclán. En su redacción empleó el autor diez años. Se narra una historia breve y sencilla, como si fuera una misteriosa leyenda hagiográfica de tiempos remotos. Se presenta una visión de la Galicia ancestral, rural y milagrera (la del Camino de Santiago) en la que se sitúa la sorprendente 'historia de Adega', pobre pastora huérfana y visionaria. En el apéndice se incluyen los cuentos publicados en la prensa e incorporados a Flor de santidad.

(Suplemento 'Fontana Sonora' de 'Caminar Conociendo' nº 4, página XV. Mayo de 1995)

José Mª Amigo Zamorano: RESEÑA DE LIBROS: 'Azumbres de amor'

Por José Mª Amigo Zamorano

TÍTULO: Azumbres de amor
AUTOR: Andrés García Madrid
EDITORIAL: Libertarias/Prodhufi
CIUDAD: Madrid
AÑO: 1994

El poeta madrileño Andrés García Madrid nació el 17 de octubre de 1927 y, aunque llegó tarde a la literatura después de pasar por diferentes oficios (delineante, técnico indsutrial, director de fábrica) ya lleva una decena de libros (poesía sobre todo, pero también teatro) De entre ellos destacamos Las Huellas que realiza en colaboración con nuestro amigo y colaborador, el pintor Ricardo Zamorano. Las Huellas es una carpeta de estampas y poemas que pronto se convirtió en libro.
Este que reseñamos, Azumbres de amor, es el último publicado. Consta de 30 poemas, varios de ellos sonetos, que tienen como denominador común el amor; incluye 5 poemas, titulados Suite-Getafe, que hizo sobre grabados del pintor cubano Luis Cabrera con el que ya había trabajado en 1991.
Arranca el libro con una poesía titulada Loco de amar que parece una especie de declaración de principios, o justificación, por el hecho de escribir de amor. No cabe duda, de que un hombre comprometido con su entorno y viendo cada día tantas canalladas y miserias, tanto 'chorizo', tanto sinvergüenza, no puede dedicarse a Eros sin antes declarar protestando que no está de acuerdo con el estado actual de las cosas, y después continuar al modo de Celaya: 'tengo derecho a un alto'; al modo de Martí: 'ganado tengo el pan, hágase el verso'. Una muestra de lo que decimos son los versos de García Madrid: '¿quién, amor, entre cardos y fusiles, / sin estar bebido, paz pide y paz bebe?'; o estos otros: 'pero, paar el dolor de mi pueblo, / ¿qué pongo? si sólo tengo versos'.

(Suplemento 'Fontana Sonora' de 'Caminar Conociendo' nº 4, página XV. Mayo de 1995)

José Mª Amigo Zamorano: Reseña de libros: 'La sombra desterrada y otros poemas'

Autor: Juan José Domenchina
Título: La sombra desterrrada y otros poemas
Ediciones Torremozas, S. L.
Ciudad: Madrid
Año: 1994


Hace la reseña: José Mª Amigo Zamorano



Del libro de Juan José Domenchina 'La sombra desterrada y otros poemas' publicado recientemente por Ediciones Torremozas, destacamos el siguiente soneto titulado 'La voz remota':



Corriente por de dentro, soterrada,

voz que se me quedó bajo la tierra

que tuve y que tuvo. Allí no yerra;

allí está siendo como siempre, entraña.



Ya no canta en falsete la patraña

que atipla al que, avenido, se destierra.

Pronuncio desde allí, que es donde entierra

su son el grave acento que no engaña.



Aquí, sombra a lo lejos, me acompaña

el ademán suasorio de una tierra

que esgrime el gesto con rotunda maña.



Y os hablo, limpio timbre que se empaña

sobre los mares, como muerto en guerra,

desde una fosa, con mi voz de España.



La primera edición de 'Sombra desterrada' y 'Nueve sonetos y tres romances' se hizo en México entre 1950 y 1952 y componen este libro.

La voz del destierro suena en este gran poeta exiliado, tras la guerra del 36-39, en México, desgarrada como en pocos.

Juan José Domenchina fue saludado ya desde joven como un buen poeta por importantes escritores como Azorín, Juan Ramón Jiménez...

En el frontispicio de esta edición de Torremozas, Ernestina de Champourcín, que tantos años de vida 'y de palabra poética' compartió con el poeta dice qeu la obra de Juan José Domenchina: 'puede dividirse claramente en dos etapas o tal vez tres si afinamos el oído para escuchar hasta las notas más ocultas del segundo periodo de su vida: aquel que pasó en México'. Y es en México desde 1936 donde inicia el poeta su larga serie de poemas exiliados o si se quiere sobre el exilio.

En fin un poeta liberado, por obra y gracia de esta editorial que dirige la poetisa Luzmaría, del secuestro injusto, doloroso, a que el olvido lo tenía sometido.

De él había dicho Gerardo Diego que 'una técnica portentosa, unida a una riqueza de dolor acumulado y a una capacidad de comunicación estremecida que por serlo es de tan alto grado, resulta estremecedora. Quevedo es el ejemplo que está más cerca de Domenchina´.



EN 'CAMINAR CONOCIENDO' Nº 4. PÁGINA XVI DEL SUPLEMENTO 'FONTANA SONORA'. MAYO DE 1995

José Mª Amigo Zamorano: DOS CENTENARIOS: ENGELS y MARTI

DOS CENTENARIOS: ENGELS y MARTÍ

El 19 de mayo DE 1885 moría en su patria el gran poeta y político CUBANO, José Martí y el 5 de agosto del mismo año lo hacía, en Londres, Federico Engels, uno de los más importantes organizadores del movimiento obrero del siglo pasado. Ambas, personalidades controvertidas, influyeron y siguen influyendo en numerosas personas, hasta el punto de enarbolar sus retratos, como si de santos se tratara. Desde esta biblioteca, donde se hallan algunas de sus obras, queremos recordar este evento sin prejuzgar que sus obras (el tiempo lo dirá) perduran. Como grandes de su tiempo estuvieron atentos a lo que acontecía en el mundo; una muestra son estos comentarios sobre España, de aquel entonces que parece hoy. No en vano las bibliotecas son depositarias de la memoria del Hombre.

Engels, F.

Martí, J.


La Política española

por José Martí
Nueva York, 23 de mayo de 1882

Los elementos de la querella flotaban por el aire. El primer debate de la Cámara ha puesto de relieve la querella. No bien se anunció por el gobierno el próposito de establecer, como preparación al jurado, juicios públicos y orales, que son menos que el jurado, y más que las actuales formas de juicio, alzáronse en rebelión los radicales sagastinos, exigiendo a su jefe que propusiese el establecimiento inmediato de un jurado, puesto que un pueblo que manejó ya sin riesgo y con honor esa institución, no necesitaba prepararse para ella.

Los descontentos claman por la adopción inmediata de jucios por jurados, del presupuesto económico, del matrimonio civil. Sagasta responde que no está España madura para el establecimiento de esas instituciones.

Alonso Martínez, el Ministro de Justicia, anunció desde el banco del gobierno que el gabinete introduciría en la sesión próxima el proyecto de ley de juicios por jurado, y un nuevo código penal, más encaminado a corregir que a espantar, y a purificar que a corromper, como corrompe y espanta, con sus penas envilecedoras, el código vigente. Tales son cárceles de España que el que entra en ellas sale criminal jurado.

Y una flor que cae en un presidio de España, sale llaga. En verdad que es tiempo de atender a esa señora ilustre y modestísima, que pide con acentos de evangelista y de profeta que se truequen en penitenciarías y presidios, y estos y las inmundas cárceles en escuelas para los pecadores. Concepción Arenal se llama esta dama ilustre; no tiene España otra más grande. Decíamos que el riesgo de desarme del bando sagastino parecía, a merced de la prosa del Ministro, conjurada. Es tregua: no desenlace.
José Martí

Publicada en La Opinión Nacional de Buenos aires (son extractos)

(Se publicó en la revista 'Caminar Conociendo' en el nº 4, en la pag. XVI del suplemento de esta revista titulado 'Fontana Sonora' en mayo de 1995)


miércoles, 14 de febrero de 2007

José Mª Amigo Zamorano: DOS CENTENARIOS: ENGELS y MARTI

DOS CENTENARIOS: ENGELS y MARTÍ


El 19 de mayo DE 1885 moría en su patria el gran poeta y político CUBANO, José martí y el 5 de agosto del mismo año lo hacía, en Londres, Federico Engels, uno de los más importantes organizadores del movimiento obrero del siglo pasado. Ambas, personalidades controvertidas, influyeron y siguen influyendo en numerosas personas, hasta el punto de enarbolar sus retratos, como si de santos se tratara. Desde esta biblioteca, donde se hallan algunas de sus obras, queremos recordar este evento sin prejuzgar que sus obras (el tiempo lo dirá) perduran. Como grandes de su tiempo estuvieron atentos a lo que acontecía en el mundo; una muestra son estos comentarios sobre España, de aquel entonces que parece hoy. No en vano las bibliotecas son depositarias de la memoria del Hombre.

Engels, F.
Martí, J.


Corrupción de los hombres públicos


Por Federico Engels
Londres, 15 de agosto de 1854

Jamás revolución alguna ha ofrecido espectáculo más escandaloso por la conducta de sus hombres públicos que esta revolución emprendida en pro de la ‘moralidad’. La coalición de los viejos partidos que forman el actual gobierno de España (el de los adictos a Espartero y el de los adeptos a Narváez) de nada se ha ocupado tanto como de repartirse el botín consistente en puestos de dirección, empleos públicos, títulos y condecoraciones.
Para calmar los recelos de la ‘chusma’, el torero Pucheta ah sido ascendido de director de los mataderos a director de la policía.
El desdoro en el reparto del botín se refleja de particular manera en distribución de loa cargos de embajadores.
Me refiero al nombramiento de González Bravo para la embajada de Constantinopla. Este hombree es el prototipo de la corrupción española. En 1840 publicaba el Guirigay –especie de punch madrileño-, desde el que lanzaba los más furiosos ataques contra Cristina. Tres años después, su afán de ocupar un cargo lo hizo un moderado estrepitoso. Narváez, que necesitaba un instrumento dócil, lo utilizó como primer ministro de España y le pegó la patada en cuanto pudo prescindir de él. En el entretanto, González Bravo entregó la cartera de Hacienda a un tal Carrasco, quien saqueó el Tesoro español sin andarse por las ramas. Nombró subsecretario del Tesoro a su padre, el cual había sido sustituido de un cargo subalterno en el Ministerio de Hacienda por malversación de fondos, e hizo a su cuñado, alabardero del teatro del Príncipe, paje de la Reina. Cuando se reprochó su apostasía y su corrupción, González Bravo contestó: “¿No es ridículo ser siempre el mismo?". Pues este hombre ha sido elegido para desempeñar una embajada de la ‘revolución de la moralidad’.

Federico Engels
New York Daily Tribune, 1 de septiembre de 1854
(son extractos)

DE LA PÁGINA XVI DE 'FONTANA SONORA' SUPLEMENTO DE LA REVISTA 'Caminar Conociendo' Nº 4 DE3 MAYO DE 1995

lunes, 12 de febrero de 2007

LEOPOLDO DE LUIS: 'Vicente Aleixandre: un doble aniversario'


VICENTE ALEIXANDRE: UN DOBLE ANIVERSARIO

Por Leopoldo de Luís

Para mí, el nombre de Las Navas del Marqués se une a la biografía de Vicente Aleixandre. Ya se ha contado en distintos libros el hecho crucial del encuentro, durante el verano de 1917. Dos estudiantes de 19 años pasan juntos un mes en Las Navas y charlan de literatura. Uno de ellos, Dámaso Alonso, estimula al amigo, Vicente Aleixandre, para que aborde lecturas poéticas. Quizá haya quedar la razón a otro poeta, León Felipe, cuando escribió que los poetas no tienen biografía, tienen destino. Parece que ese destino visitó Las Navas aquel verano para diseñar el mapa no solo de un poeta, sino de la misma poesía española, porque la poesía española ha sido distinta después de Vicente Aleixandre. Si aquel muchacho, veraneante de Las Navas, no hubiese escrito nunca, la poesía española sería diferente.
Uno de los hitos de la lírica castellana cumple ahora, en 1994, el medio siglo. Sombra del Paraíso, probablemente el libro más conocido de Aleixandre, se publicó en mayo de 1944. Se escribió entre otoño de 1939 y otoño de 1943.
La revolución formal, que crea e impone nuevos ritmos, la belleza expresiva, la originalidad de las imágenes, convierten este libro en una joya de la poesía de todos los tiempos. Tres impulsos lo crean o, por mejor decir, con tres aspectos nos sorprende: los recuerdos luminosos de la infancia, vistos como un paraíso perdido; la sensación de pérdida de una edad de oro como infancia del mundo; la conciencia de la unidad cósmica, de una creación armoniosa o edén pre-adánico.
Sombra del paraíso vino a ser el milagro poético de la postguerra. Por ese libro la poesía volvió a ser hermosa, sin ser sólo hermosura.
No debe pasar este aniversario: medio siglo de la aparición de Sombra del paraíso, sin que recordemos y rindamos homenaje al altísimo poeta. La primera edición se acabó de imprimir en la imprenta de Silverio Aguirre, en Madrid, calle de General Álvarez de Castro, 40 –para ediciones Adán- el 23 de mayo. Volumen de 220 páginas, formato 17x23. Se tiraron 1.750 ejemplares, de los cuales 1675 en papel de edición y 75 en papel de registro. La cubierta, en cartulina color crema, se imprimió en verde, con una viñeta del pintor Eduardo Vicente. El mercado de las obras poéticas es tan feble, que para la primera edición de una de las claves de la poesía castellana no se previeron ni dos mil ejemplares. Con todo, su importancia era tal, que cuatro años más adelante, en 1947, una gran editorial, Losada, de Buenos Aires, lanzó la segunda edición, ya muy amplia, en su colección de ‘Poetas de España y América’.
El joven estudiante que en 1917 toma en Las Navas su primer contacto con la poesía, alcanza sesenta años después el Premio Nóbel: 1977. Al recordar hoy el aniversario de su gran libro, recordemos también que este otoño se cumplen diez años de su muerte: en la madrugada del 14 de diciembre de 1984. Dos efemérides en el mismo año, que bien merecen un acto de homenaje nacional.

Leopoldo de Luís

EN PÁGINA 5 DEL Nº 3 DE LA REVISTA ‘CAMINAR CONOCIENDO’. MAYO DE 1994. Y EN LA PÁGINA 6 DEL Nº 4 DE LA MISMA REVISTA DE MAYO DE 1995

ANDRÉS GARCÍA MADRID: 'El verano más grande de Las Navas del Marqués'


Homenaje a Vicente Aleixandre


Nada se podía sospechar de aquel marquesado,

pero en el castillo de la nava

tendida entre graníticos almendros de nieve

el hado dispuso el sonido de 'sombras'

cuando el poeta uncido de 'paraíso'

se vierte por las hojas cárdenas del estío.


El silencio como una acidez que se pudiera soñar

se desliza tímido por los roquedos

y más allá, el encuentro azul

de dos enjambres ardientes,

donde el frescor esconde sus raíces, estalla

el verso y acude, violeta de roemro.


La plza ancha, melena peinada por el aire,

sabe, y de qué manera,

de rítmos azúcares del viento.

El pinar, fluidez de agujas vírgenes,

condensa un verdor célibe. Serranos

contrastes se impregna de mítico rigor,

cuando cinco lustros atrás, aquí,

el géiser aleixandrino fulmina,

como el padre de los hijos de la ira,

sus espumas de fuego al cielo.


Andrés García Madrid


DE LA REVISTA 'CAMINAR CONOCIENDO'. Nº 4. PAG.27. MAYO DE 1995

sábado, 10 de febrero de 2007

PERE GIMFERRER: 'Homenaje'


Homenaje

por Pere Gimferrer

Hasta Las Navas del Marqués
llegue mi voz y, en castellano,
diga el relámpago en el llano
que el verso de Vicente es.

El robledal ¿es más cortés
que el pinar hondo, aquí en mi mano?
Respiración de un oro arcano
tiene la noche en el bauprés.

Pues en la nave de la nava
la claridad del cielo cava
un acerante arder de clava:

ojos de lince en el confín
donde el crepúsculo no acaba
sus esponsales de carmín.

Pere Gimferrer
Barcelona, 5 de mayo de 1994

A LA PARTE IZQUIERDA DE LA PÁGINA 28 DE LA REVISTA 'Caminar Conociendo', DONDE ESTÁ ESTE SONETO DE PERE GIMFERRER, SE REPRODUCE EL MANUSCRITO CON SU FIRMA Y TODO. Nº 4. MAYO DE 1995

(*) Pere Gimferrer :
Poeta, traductor y crítico literario español nacido en Barcelona en 1945.Estudió Derecho y Filosofía y Letras en la Universidad de Barcelona. A la edad de dieciocho años publicó su primer libro «El mensaje del tetrarca». Su maestría precoz fue reconocida en 1966 con el Premio Nacional de Poesía por su libro «Arde el mar», constituyéndose en uno de los poetas más importantes de su generación. Desde 1970 utiliza exclusivamente el catalán para la poesía, si bien él mismo los ha traducido al castellano para ediciones bilingües.En 1985 ocupó la vacante dejada por Vicente Aleixandre en la Real Academia Española. Obtuvo de nuevo el Premio Nacional de Literatura en 1989, el Premio de Literatura Catalana, el Premio Ciudad de Barcelona, el Premio Cavall Verb de la Asociación de Críticos Españoles y el Premio de la revista Serra d'Or. En 1997 recibió el Premio Nacional de Literatura de la Generalitat de Catalunya, en 1998 el Premio Nacional de las Letras Españolas y en el año 2000 el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana.«Marea solar, marea lunar» y «El diamante en el agua», son sus últimos poemarios.

viernes, 9 de febrero de 2007

Juan Cruz Iguerabide: 'Elektrak'


ELEKTRAK

Elektrak ez du zapirik aurkitzen
Kutxa negartien sagarrusainezko cubiletan.

Illargiaren izpi bat erori da
Etxaurreko aska pitzatura eta
Xapaburu batek irentsi du zalaki.

Elektraren itzal mehea kandelaren
Esku dabil hil ez hil.

Illargiaren izpi batzuk hegaldatu egin dira
Etxaurreko aska pitzatuaren gainetik igaroz eta
Xapaburuak begira egon dira ahoa irekita.

Elektraren gogo dardatia
Kolkoan izzoturik arraildu da.

Illargia kriski kraska jausi da
Etxeaurreko aska pitzatua lehertaraziz
Etxeaurreko aska pitzatua lehertaraziz eta
Xapaburuak sabelez gora barreiatuz.

Elektraren oin odoleztatuek
Letra gorriak idatzi dituzte
Harrikoskor batean eta bestean
Illarak behinik behin irakur ditzan.
DE LA PÁGINA 29, DEL Nº 4 (MAYO DE 1995) DE LA REVISTA ‘Caminar Conociendo’

Juan Cruz Iguerabide: 'Electra'


(traducción del autor al castellano del poema en euskera ‘Elektrak’ para el homenaje a Vicente Aleixandre)



ELECTRA
(Espejo evanescente, receptáculo de abismo)

Escudriña Electra entre baúles de llanto
-vientres con perfumes de manzana-

Un rayo de luna se hunde en el vetusto estanque
De un patio decrépito
Y es engullido por un voraz renacuajo.

La sombra trémula se balancea
A merced de la luz mortecina de la vela.

Múltiples rayos de luna se precipitan
En el azorado estanque
Y son devorados por renacuajos que surgen sin fin.

En el pensamiento de Electra se suceden escalofríos
Que corren a anidar en su pecho gélido.

Hay una explosión de rayos de luna
Y el estanque salta hecho añicos…
Ahora los renacuajos yacen plateados.

Los pies ensangrentados de una Electra en tinieblas
Trazan signos en el suelo invisibles,
Ya sin luna, ya sin vela, ya sin sombra.

DE LA PÁGINA 29, DEL Nº 4 (MAYO DE 1995) DE LA REVISTA ‘Caminar Conociendo’

Juan Kruz Igerabide: 'Loti Eijerra'


LOTI EIJERRA

Masail maindireak masusta eta
Lilirik gabe geratu zaiskinalako
Bart belaunikatu eta belaunikatu
Ari izan gatzaizkin inguruan
Eta hire lepo loitzalian
Derakusanan azal leunera makartzear
Gauzkan hurrengo arnaskadari zelatan

Hire egote epelak tenk zeukan
Gure arnasaren kulunka paralizatua

Adats librearen etzakera amestia
Milaka ahaire kantatzen ari zaigun
Emeki arnasondar bakoitzean

Hire hatsaren musikaz taiutu nahi
Geninake gure gorputzaren haustura
Hire latsaren ametsetan betirako
Lurrum bihurtu nahi dinagu
Hire arnasaren gertso kizkurrean

Hire amets lurrunei esker
Ez dizkinagu ex terriro
Odol haustterreak tantoka isuriko
Ez gaitum ez leizezulotan behin eta berriz
Eroriko arnasa etenarazteraino

Pag. 29. nº 4 (mayo de 1995) Revista 'Caminar Conociendo '

Juan Cruz Iguerabide: 'Bella Durmiente'


(traducción del autor al castellano del poema en euskera ‘Loti eijerra’ para el homenaje a Vicente Aleixandre de la revista ‘Caminar Conociendo’)

BELLA DURMIENTE
(Espejo al borde del abismo)

Pues tu lienzo de mejilla
Carece de zarzamoras y lirios,
Velamos, rodilla en tierra, en torno a ti,
Y nos inclinamos hacia la piel sedosa
De tu cuello adormecido
Anhelando la próxima inhalación.

Tu reposo tibio
Mantiene nuestra respiración
En su tenso columpio paralizado.

Tu cabello suelto, en onírica cadencia,
Tañe aires de viento por millares,
Reteniendo los restos de un suspiro
Que se resiste a morir.

Y con ese reticente son apegado a tu cabello
Quisiéramos remendar el abismo de nuestro ser,
Quisiéramos convertirnos en aliento cálido
Parapetado entre los versos-cabellera.

Y así, a la neblina de tu sueño asidos,
No volveremos a derramar sangre cenicienta,
No volveremos a precipitarnos
En abismos de exhalación sin fin.

Juan Cruz Iguerabide
Premio de la Crítica 1995

(Versos enviados a ‘Caminar Conociendo’ de su obra ‘Bizitzarenkin solasean – Conversando con la vida’)

DE LA PÁGINA 29, DEL Nº 4 (MAYO DE 1995) DE LA REVISTA ‘Caminar Conociendo’

miércoles, 7 de febrero de 2007

RAFAEL MORALES: 'A Vicente Aleixandre'

por Rafael Morales




Yo creía que el tiempo

dejaba siempre un rastro


de afligido silencio,


un terco y desolado desamparo,


una yerta sabana


de interminable soledad.


Conocía sus carros


rodando sigilosos por las noche,


despojando a los hombres


de todo lo que aman:


los besos,


las promesas,


los sueños,


la esperanza...


Creí que era un gran rey


coronado de muerte y de tristeza.


Pero en sus largas


carreteras de hastío,


en sus nocturnos mapas


de ceniza y de sombra


y siento alzarse el reino


de tu hermosa palabra,


pujar por claras torres,


cantar eternamente


donde puso la vida


sus auroras volcánicas.





Rafael Morales para 'Caminar Conociendo' en homenaje a Vicente Aleixandre.





ESTA POESÍA Y LA VA A CONTINUACIÓN, TITULADA 'Tomo nota', ESTÁN TOMADAS DE LA REVISTA 'Caminar Conociendo', Nº 4, PÁGINAS 31 y 32. MAYO DE 1995

OVIDIO PÉREZ MARTÍN: 'Tomo nota'

1
Al alba
el mundo aparece dibujado
con líneas de neblina azul.

2
'Y podía leerse la lectura cúfica de los espinos' (Sepehrí)

Las ramas escriben en la hoja del cielo.
Inmóvil.
Un pájaro
salta de la punta de una rama
a otra rama...
Las letras se cimbrean.

3
'¿Cuántas caricias vierte esta luz en un cuenco de cobre?' (Sepehrí)

Miro el río destellante.
No es un cuenco.
La luz concéntrica
reparte al horizonte.

4
'Lleno estoy de luz' (Sepehrí)

Me ven porque despido luz.
Todos mis gestos,
todos mis movimientos
son movimientos de la luz
que los demás confunden conmigo.

5
Mantel blanco.
Problema:
el blanco color de la nada.
Solución:
un racimo de uvas en el mantel;
desaparecen
las huellas
de la nada.

6
'Y estoy tan exaltado que quiero correr hasta el fin de las llanuras' (Sepehrí)

¡Ah!,
¡sí!,
andar,
ver,
tocar
los pliegues de la montaña,
las fuentes,
los arroyos,
la tenue bruma azul oculta.
Levantar la falda de la bruma
y tocar sus secretos.

7
Sí,
es como un latido
que suena
no se sabe dónde.

8
'Que recuerde dibujar el plano de las cabras' (Sepehrí)

Que recuerde mañana mismo
dibujar el plano de mi niñez;
que no falte la azada,
el hogar,
las manos,
el juego al escondite
con la sombra de la luna,
los brazos de la madre;
que recuerde dibujar el plano
que siempre fue conmigo.

9
Enzarzado en los botones
de tu casa
está el mundo rutilante.
El mundo entero
un poco más acá
de tus manos.

10
Hombre,
un árbol lleno de pájaros.
Entran y salen como de un nido.

Un día...
todos vuelan.

Ovidio Pérez Martín
(Del libro 'El soto y su donaire', inédito)